Atizapán de Zaragoza, 22 de septiembre de 2009.- El presidente Adolfo López Mateos “fue un hombre que supo integrar las distintas voluntades políticas y tuvo la visión y la sensibilidad para conducir exitosamente el rumbo del país en un contexto complejo”, afirmó el diputado local Enrique Jacob Rocha, orador oficial en la Ceremonia Conmemorativa del XL Aniversario Luctuoso del presidente de México. Ante el gobernador Enrique Peña Nieto, agregó que al paso del tiempo, su legado inspira a nuestra generación en el propósito de mantener una gobernabilidad democrática. “En la que se reconoce y respeta a todas las fueras políticas. En la que se gobierna con la corresponsabilidad de todos”, agregó el diputado. Destacó que la agenda institucional que desde el Estado de México se impulsa, coloca en el centro de todo el desarrollo de su gente: su seguridad integral, el combate efectivo contra la pobreza, su derecho a tener empleo digno y bien remunerado, y todo ello desde eficaces políticas públicas, no sólo desde la perspectiva del discurso. “Así se honra todos los días la memoria de nuestro ilustre paisano: ganando el respeto de los gobernados”. En presencia de familiares, amigos y ex colaboradores del ilustre atizapense recordado, el legislador local asentó que “nuestros tiempos son de trabajo responsable y decidido, son de entrega total a México”, tal como reza la frase que siempre guió al presidente Adolfo López Mateos: es tiempo de servir a la patria con profunda vocación de servicio. Jacob Rocha, luego de enlistar acciones y dimensionar al estadista mexiquense que gobernara a nuestro país de 1958 a 1964, apuntó que “así se hace política en nuestra entidad: construyendo todos los días con nuestro trabajo, el más grande de los monumentos erigido a la razón, al desarrollo, a la equidad y a la justicia”. Previamente, el doctor Mariano Palacios Alcocer, al hablar a nombre de familiares, amigos y ex colaboradores de López Mateos, reseñó detalladamente el carácter de estadista, humanista e internacionalista del ejemplar mexiquense. Precisó que para López Mateos, el crecimiento económico no era un fin en sí mismo, sino un instrumento para el desarrollo social. El ex secretario del Trabajo y ex mandatario queretano, Palacios Alcocer, recordó que el presidente mexiquense sabía que lo más importante de la política es el respeto a la dignidad humana y que todo gobierno debería procurar la justicia por el camino del derecho. “Fue un hombre intachablemente honrado y supo vivir con indeferencia frente a las tentaciones del poder y del dinero”. 
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